Una infección dental es una causa muy habitual de las urgencias odontológicas y suelen aparecer cuando la placa bacteriana de la boca accede al interior del diente.
Estas infecciones pueden llegar a ser muy molestas y dolorosas, pero tratadas correctamente y diagnosticadas a tiempo, no tienen por qué ocasionar mayores problemas.
Y aquí está el quid de la cuestión.
El famoso tiempo. Ese que tardas en llamar desde que notas las primeras molestias hasta que el dolor resulta insoportable días o semanas después.
Por eso, si necesitas atención inmediata, te recordamos que somos dentistas de urgencias en Sevilla, y que ofrecemos servicio todos los días, incluido fines de semana (con atención 24 horas). Pide cita ahora y te ayudaremos a encontrar el mejor tratamiento para tu caso.
Pero si de momento no nos necesitas y solo buscas información, te contamos cómo identificar los síntomas de una infección dental, cuáles pueden ser las causas y consecuencias, y te explicamos sus posibles soluciones para que sepas cómo debes actuar.
¡Te invitamos a seguir leyendo!
¿Cómo saber si tengo una infección dental?
Cómo saber si tienes una infección dental es fundamental para tomar la decisión de acudir o no al dentista. Por eso, reconocer sus síntomas principales es primordial para hacer un diagnóstico.
Entre los principales síntomas de una infección dental se encuentran:
- Dolor localizado en un diente o varios.
- Sensibilidad extrema al frío o calor de los alimentos.
- Dolor al apretar los dientes o al darle un golpecito.
- Mal aliento y sabor amargo.
- Inflamación, bulto y enrojecimiento de la encía alrededor del diente.
- Presencia de pus.
- Sensación de diente largo (como si al cerrar la boca chocase antes que el resto de dientes).
- Inflamación de los ganglios del cuello.
- Y en los casos más graves, inflamación externa de la cara en la zona maxilar o incluso fiebre.
Si notas alguno de estos síntomas, te recomendamos que no esperes y pidas cita de inmediato con tu dentista de confianza.
¿Y si no me doy cuenta?
Para que nos entendamos, una caries es una infección dental.
Y, muchas veces, la caries no duele hasta que no ha avanzado y accedido al interior del diente. Por eso es recomendable acudir periódicamente a tus citas con el dentista y mantener una higiene bucal adecuada.
Con el ritmo de vida actual, tendemos a posponer todo lo que no consideramos ‘urgente’. Y es, precisamente así, cuando se crean las urgencias más graves.
Ahora que ya te hemos hablado de los síntomas principales para identificar una infección dental, vamos a contarte por qué puede producirse.

¿A qué se debe una infección dental?
Las infecciones dentales ocurren cuando hay un aumento de la placa bacteriana en la boca.
Estas bacterias invaden la pulpa dental (nervio) y puede propagarse a los tejidos que rodean al diente.
Conocer las causas que pueden provocar una infección dental te ayudará a prevenirlas. Aunque algunas, lamentablemente, no se pueden prevenir.
Nuestros dientes, al estar en contacto continuo con alimentos, son una fuente de bacterias que propician la aparición de infecciones.
De ahí que los dentistas insistamos tanto en que la higiene bucal es fundamental.
Sin embargo, aunque te laves los dientes mil veces, puede haber otros motivos que te provoquen una infección dental, como las caries, las enfermedades periodontales (gingivitis y periodontitis) o un fuerte traumatismo en los dientes.
Sea cual sea el motivo que la provoque, es importante que la trates cuanto antes para que no se expanda a otras partes del cuerpo. Y ahora verás por qué.

¿Qué pasa si la infección llega al hueso?
Nadie mejor que nuestras especialistas, Julia Cabedo y Susana Vázquez, para explicarnos esta cuestión.
“Cuando la infección dental llega al hueso, se produce un absceso, o comúnmente conocido como flemón dental, que es una de las consecuencias habituales de la infección en un diente. Un absceso es una bolsita de pus en la punta de la raíz del diente. Es importante tratarla cuanto antes, ya que si la infección sigue evolucionando, puede pasar a los tejidos blandos de la cara”.
Por este motivo, si notas alguno de los síntomas explicados más arriba, te recomendamos que pidas cita en tu dentista o en uno de urgencia para diagnosticarte a la mayor brevedad.
Una vez diagnosticado el absceso dental, se te realizará una radiografía para valorar hasta dónde ha llegado la infección y cómo tratarla de forma adecuada.
Si el dolor es insoportable, puede que te preguntes: “¿Qué tomar para la infección dental? o ¿hay algo para aliviar el dolor?, ¿qué antibiótico es mejor para la infección dental?” Te lo contamos en el siguiente apartado.
¿Qué tomar para la infección dental?
Antes de hablarte sobre qué tomar para la infección dental, nuestro primer denticonsejo es que acudas a un especialista.
Pues, como dentistas, sabemos lo importante que es la valoración de un profesional para elegir el tratamiento más adecuado.
Mientras tanto, si el dolor es muy agudo y necesitas un alivio rápido en casa, consulta con tu médico la posibilidad de tomar algún analgésico o antiinflamatorio. Eso sí, nunca tomes ninguna medicación sin la prescripción del médico o del odontólogo.
Además, recordamos que estos medicamentos son solo una solución temporal y es el especialista el que debe diagnosticar y tratar tu caso de forma personalizada para curar tu infección dental de forma definitiva.

¿Cómo curar una infección dental?
Para saber cómo curar una infección dental, lo primero que hay que averiguar es el origen y los motivos de la infección.
Esto nos ayudará a realizar un diagnóstico preciso y establecer así el tratamiento más adecuado para ti, que puede incluir medicamentos antibióticos o no. Para ello, nadie mejor que un dentista para valorar tu caso.
El tratamiento más habitual empieza por realizar un examen de las piezas afectadas, que puede incluir una radiografía para ver el alcance de la infección.
Una vez localizado el origen, si el especialista lo considera necesario, puede recetarte un tratamiento farmacológico para curar la infección dental de forma definitiva.
Otro ‘remedio casero’ que puede recomendarte es que realices enjuagues bucales con agua tibia y sal para reducir la inflamación y favorecer el drenaje (si hay pus) u otro tipo de enjuagues que ayuden a mejorar su evolución.
Dependiendo del origen de la infección, tu dentista puede recomendar la realización de un empaste en los estadios iniciales de la lesión, o incluso una endodoncia o extracción en casos más avanzados, cuando el nervio se ha visto afectado.
“Y si solo me duele un poco… ¿es urgente ir al dentista o no?”
En seguida te lo contamos.
¿Debo ir a un dentista de urgencias por una infección dental?
Sí y siempre sí.
Principalmente, porque cuando hay una molestia ligera, no sueles salir corriendo a pedir cita al dentista. Y este no es el camino…
¿Por qué?
Porque la infección se agrava y el tratamiento puede ser más complejo. Cuanto antes se trate la causa de la infección, mejor pronóstico para tu diente y tu sonrisa.
Así que ya sabes, si notas algunos de los síntomas descritos en este artículo, no dudes. Acude a un dentista de urgencias.
En este post te hemos dado una visión de las causas y consecuencias de las infecciones dentales, algunas recomendaciones sobre cómo curar una infección dental y, en definitiva, cómo actuar antes estas situaciones, pero aún no te hemos contado lo que puedes hacer para prevenirlas.

¿Se pueden prevenir las infecciones dentales?
Una correcta higiene bucal y acudir periódicamente al dentista es la mejor prevención para evitar infecciones dentales.
Las caries son las infecciones dentales más comunes y más fáciles de prevenir, al menos cuentas con más herramientas para prevenirlas. Eso sí, mal tratadas, pueden ser el inicio de un problema grave posterior.
En el caso de las caries, la prevención juega un papel fundamental.
Sin embargo, hay casos en los que es inevitable que se produzcan infecciones.
Una infección dental por un traumatismo o una enfermedad periodontal que tiene un componente genético (por ejemplo) no se pueden prevenir, pero en la mayoría de los casos, cuidando la alimentación y prestando atención a tu higiene dental puedes esquivar las infecciones más comunes, como las caries.
Para reducir riesgos, vamos a darte unas pautas o recomendaciones que puedes seguir y que, sin duda, te ayudarán a prevenir una infección bucodental:
- Reemplazar tu cepillo de dientes cada 3 meses
- Evitar comer con frecuencia y picar entre horas.
- Evitar las bebidas y comidas muy azucaradas.
- Evitar el alcohol y el tabaco.
- Mantener una higiene bucal adecuada.
- Acudir periódicamente a tu dentista de confianza.
Dicho esto, esperamos haberte ayudado y que esta información te haya resultado de utilidad.
Recuerda que si notas alguno de los síntomas de infección dental descritos en el artículo y necesitas un dentista de urgencia en Sevilla, nuestra clínica SevillaDental está especializada en tratar este tipo de casos.
Nuestros especialistas te atenderán a la mayor brevedad posible.
Pide cita ahora para una consulta llamando al 954 211 226 o a través de nuestra página web.